15 de abril de 2011

Trabajos desde Casa Pueden Terminar en Fraude

Insurance Fraud

Todo mundo ha visto los anuncios tentadores ofreciendo oportunidades de trabajo desde casa. Las promociones aparecen en la forma de volantes pegados en los postes telefónicos, clasificados en los periódicos, en televisión, en tu correo electrónico y en todo el Internet. Te prometen cientos si no miles de dólares a la semana por teclear algo, llenar sobres, procesar facturas médicas, etc. Sólo tienes que hablar por teléfono o hacer clic aquí o allá.

Las promociones podrían parecer tentadoras, especialmente hoy en día con la incertidumbre económica. Pero ten cuidado de cualquier oferta que prometa dinero rápido por un esfuerzo mínimo ya que en muchos casos se trata de estafas que solamente llenan los bolsillos de los delincuentes.

El FBI y otras agencias del orden público investigan este tipo de actividades y rastrean a las personas responsables. Sin embargo, la defensa principal contra estas estafas es no caer en ellas. Por eso lo primero es familiarizarse con el tipo de estafas que existen.

Ejemplos de las estafas de trabajo de casa más populares

  • Adelanto de pago: ¡Empezar un negocio de casa es fácil! Sólo tienes que invertir unos cientos de dólares en inventario, en materiales para el entrenamiento y para establecer el negocio, dicen. Pero por supuesto, cuando llegan los materiales, si es que llegan, no valen nada y tú te quedas con la factura. 

  • “Comprador misterioso” financiado por cheque falsificado: se te manda un cheque con una buena cantidad de dinero y se te pide que lo deposites en tu cuenta de banco. Después se te pide extraer el dinero para ir de compras y para que revises los servicios de tiendas locales y de compañías de transferencias bancarias. Tú te quedas con una pequeña cantidad del dinero para realizar tu "trabajo" pero después, según las instrucciones, debes mandar el resto del dinero a tu "empleador" por correo o a través de una transferencia bancaria. Podría sonar bien, con excepción a un detalle: el cheque inicial que recibiste es falso, y para cuando tu banco te notifica, tu dinero ya desapareció y además eres responsable por el cheque falsificado.

  • Fraude pirámide: se te contrata como un "distribuidor" y se te pide que desembolses grandes cantidades de dinero para adquirir material promocional así como inventarios de productos de poco valor (como panfletos para hacerte rico rápidamente). Se te promete dinero si reclutas más distribuidores, y entonces tú convences a tus amigos y familiares a que participen. La operación crece exponencialmente pero después se desmorona. Los únicos que ganaron dinero fueron los delincuentes que empezaron la pirámide.

  • Participación sin conocimiento en una actividad criminal: los criminales, frecuentemente ubicados en el extranjero, a veces utilizan a sus víctimas sin que ellas lo sepan para llevar a cabo sus operaciones, robar o lavar dinero, y a la vez mantener el anonimato. Por ejemplo, podrían "contratarte" como un agente con base en Estados Unidos para recibir y re-mandar cheques, mercancía y solicitaciones a otras víctimas potenciales. Todo sin que te des cuenta de que se trata de un engaño que no deja pista de los ladrones.

Consejos para evitar ser víctima de fraude

Muchas de estas estafas podrían convertirse en robo de identidad ya que durante el proceso de solicitación se te pide que proveas información personal que después pueda utilizarse para robar dinero de tu cuenta de banco o establecer tarjetas de crédito en tu nombre.

Para evitar ser una víctima se recomienda:

  • Contactar al Better Business Bureau para determinar la legitimidad de la compañía

  • Sospechar de promociones que solicitan dinero por adelantado antes de proveer instrucciones o productos

  • No proveer información personal al interactuar por primera vez con un potencial empleador

  • Hacer tu propia investigación sobre oportunidades legítimas de trabajo desde casa, utilizando recursos disponibles en la biblioteca de tu comunidad

  • Hacerle muchas preguntas a tus empleadores potenciales. Las compañías legítimas las contestarán.